Equilibrio global para cuerpo, mente y salud interna
La osteopatía es un enfoque terapéutico integral que considera al cuerpo como una unidad interconectada. A través de técnicas manuales no invasivas, se actúa sobre el sistema musculoesquelético, visceral y craneal para mejorar el equilibrio funcional del organismo.
No se trata solo de aliviar los síntomas, sino de entender el origen del malestar para tratarlo de forma global. La osteopatía resulta especialmente útil en casos de dolor crónico, migrañas, trastornos digestivos, estrés, alteraciones posturales y bloqueos articulares.
Cada tratamiento se adapta a las necesidades y particularidades de la persona. El objetivo es recuperar movilidad, aliviar tensiones y favorecer los mecanismos naturales de autorregulación del cuerpo. Es una terapia respetuosa, profunda y consciente que acompaña procesos tanto físicos como emocionales.
Preguntas Frecuentes
¿Qué diferencia hay entre osteopatía y fisioterapia?
La osteopatía trata el cuerpo de forma global, buscando el origen del problema, mientras que la fisioterapia se centra más en la zona afectada.
¿Qué tipos de osteopatía se aplican?
Osteopatía estructural (músculos y articulaciones), craneal (sistema nervioso, cefaleas) y visceral (órganos internos).
¿Para qué está indicada la osteopatía?
Dolores crónicos, migrañas, problemas digestivos, estrés, trastornos posturales, entre otros.
¿Duele el tratamiento osteopático?
No. Las técnicas son manuales, suaves y adaptadas al estado físico de cada persona.
¿Se puede combinar con otras terapias?
Sí. Puede integrarse con fisioterapia, suelo pélvico o nutrición para abordar el bienestar de forma más completa.







